Con la extensión del teletrabajo y del trabajo híbrido las aplicaciones de videollamadas y chats profesionales se están transformando en plataformas con múltiples funciones orientadas a mejorar la productividad y el bienestar de los empleados que trabajan completa o parcialmente en remoto.
La última en apuntarse a esta tendencia ha sido Zoom, que acaba de anunciar el lanzamiento de un fondo de 100 millones de dólares para invertir en startups que integren su software de vídeo en otras aplicaciones de trabajo o que creen herramientas de utilidad para incluirlas en su plataforma de videollamadas. El objetivo de los estadounidenses es configurar todo un ecosistema de apps, integraciones, plataformas de desarrollo y hardware orientado al teletrabajo en torno a su popular chat de vídeo.
Así, por ejemplo, Microsoft Viva pregunta al usuario cómo se siente a lo largo de su jornada laboral, le sugiere que se tome unos minutos para relajarse y meditar cuando lleva mucho tiempo activo y le permite enviar y recibir reconocimientos por sus labores, entre otros. También le permite acceder a los recursos formativos o a la ventana de beneficios de la empresa desde la misma plataforma.
En cuanto a la productividad, informa a los jefes de equipo sobre el desempeño de sus subalternos gracias a los datos agregados que obtiene de la interacción de los empleados con la plataforma. De esta forma, Microsoft aseguraba que Viva permitirá a los responsables de la empresa detectar los problemas o medir el impacto de los cambios al tiempo que se respeta la privacidad de los empleados.
Xataka